El ex juez Malzon Urbina se las ha ingeniado para estar siempre en el ojo de la tormenta. Hoy no es la excepción, pero no por ser autor una de las tachas que se tumbó a Julio Guzmán, sino porque está siendo denunciado por no pagar a su arrendador el alquiler de dos locales. El doctor Urbina, mismo Don Ramón, debe 14 meses de renta y el propietario le pide simplemente que desaloje, lo quiere de patitas en la calle.
ESCRIBE: RAMÓN ESPEJO CASTAÑEDA

Una larga pared en la cuadra 18 de la av. Ignacio Merino, en el distrito de Lince, lleva la pinta de su rostro con el slogan “Malzon Urbina Presidente”. Lo curioso es que el ex juez Urbina no postula en estas elecciones, aunque sí presenta tachas contra candidatos presidenciales y, por cierto, hace 14 meses que no paga el alquiler de los locales que tiene arrendado.  

Ese local de la av. Igancio Merino N° 1820 le pertenece al señor Eddy Augusto Arana Herencia, quien se lo alquiló a don Malzon Urbina a través del Contrato de Arrendamiento S/N de fecha 1° de diciembre del 2014. No es el único, también le arrendó otro local de su propiedad ubicado en el Jr Candamo N° 392 en Lince. Según el señor Arana, Malzon no le paga alquiler de ninguno de los dos inmuebles desde hace más de un año.

“Inicialmente el señor Urbina vino dando muestras de ser una persona pudiente, alardeaba de sus relaciones, me ofreció trabajo en el Congreso y hasta sus servicios como abogado ad honorem. Eso fue al inicio, cuando el local de Ignacio Merino se lo había alquilado primero a nombre de su hijo en el 2012, pero luego firmamos contrato directamente con él, así como el local de Candamo”, nos dice el señor Arana.

Él señala que el local de Ignacio Merino era alquilado para restaurante pero que Urbina nunca le dio ese uso sino que lo usaba para poner paneles políticos, pintar las paredes con su nombre, reuniones con dirigentes de La Parada, etc. Según indica, además, en el local de Candamo vive ahora su hija y como han dejado de pagar la luz y el agua, Sedapal y Luz del Sur se han llevado los medidores.

LOS PROCESOS JUDICIALES

El señor Arana y su esposa pacientemente esperaron los pagos de don Malzon que siempre los mandaba al desvío. Los meses avanzaban y el alquiler de los inmuebles significan su único sostén económico, ellos empezaron a preocuparse y a cobrarle directamente. Al no obtener respuesta satisfactoria sino solo excusas, ellos invitaron a conciliar a don Malzon, pero éste nunca asistió a las citaciones. También le envió cartas notariales que nunca han sido respondidas. Lo han llamado en innumerables ocasiones pero la respuesta siempre ha sido evasiva.  

Incluso nos mostraron un video donde don Malzon aparece en la puerta del local de Candamo diciéndole a la esposa de Arana “El lunes te voy a solucionar”, entre múltiples argumentos legales que no se entienden con claridad. “El nos sale con cada cosa acusándonos de tonterías como que la vez pasada dice que vio a mi esposa entrando con un perro a su casa, cosas absurdas”, nos dice el propietario de los locales.

Por todo ello es que el señor Arana ha iniciado dos procesos judiciales en contra del ex juez Urbina, uno por obligación de dar dinero y el otro por desalojo. “Ambos procesos avanzan muy lentamente, están prácticamente estancados. Lo que mi esposa y yo queremos en realidad es que este señor se vaya, que desocupe los locales y que el dinero que nos debe de 14 meses de renta nos lo pague progresivamente o en partes. Pero lo principal es que se vaya y que no nos siga perjudicando”, afirma el señor Eddy Arana mostrando los papeles que prueban su denuncia.

“Ese señor incluso me interpuso una demanda por ofrecimiento de pago, solo para dilatar y ganar tiempo, puesto que luego lo multaron y ese proceso se cayó. Necesitamos que se retire, nos está perjudicando terriblemente, yo estoy delicado de salud, nos ha cortado nuestros ingresos para la manutención de mis hijos, es una situación verdaderamente desesperante. No entiendo cómo este señor pudo ser juez y hasta postular a un cargo público”, señala Eddy Arana.

Nosotros hemos tratado de comunicarnos con el doctor Urbina pero se nos ha hecho imposible ubicarlo. Nunca nos ha respondido ni al celular ni al teléfono fijo. Los propietarios de los locales que él ahora usa y cuyas paredes llevan su rostro con frases como “el único que saca cara por ti”, están verdaderamente indignados. Ellos se apersonaron a las oficinas de Velaverde para hacer pública su denuncia y nosotros hemos escuchado y verificado los documentos que nos muestran. Esperemos que el doctor Urbina aclare este tema y, en el mejor de los casos, que solucione los problemas a estos propietarios que se encuentran, literalmente, desesperados. O si no, de patitas a la calle.